Metatérminos

    Códec

    Un códec (de las palabras coder y decoder, codificador y decodificador en inglés) es un programa o dispositivo que se utiliza para comprimir y descomprimir datos digitales. Su principal objetivo es optimizar el almacenamiento y la transmisión de información, especialmente en formatos audiovisuales, como audio y video, que requieren grandes cantidades de datos para mantener su calidad.

    Por ejemplo, un archivo de video sin comprimir puede ocupar varios gigabytes, mientras que, al aplicarle un códec adecuado, se reduce considerablemente su tamaño sin una pérdida notable de calidad.

    Los códecs también son esenciales en videollamadas o transmisiones en vivo, donde permiten la transferencia fluida de datos en tiempo real.

    Tipos de códec

    Los códecs se dividen principalmente en dos categorías:

    Códecs de audio

    Se encargan de procesar señales de audio para almacenamiento o transmisión. Los principales son:

    • MP3: muy popular para música, ofrece buena calidad con alta compresión.
    • AAC (Advanced Audio Coding): usado en plataformas como Spotify o YouTube por su eficiencia y calidad superior al MP3.
    • FLAC (Free Lossless Audio Codec): proporciona compresión sin pérdida, ideal para audiófilos.

    Códecs de video

    Manejan la compresión de video, frecuentemente incluyendo audio. Los principales son:

    • H.264: uno de los estándares más comunes, utilizado en YouTube y Netflix.
    • H.265/HEVC (High-Efficiency Video Coding): una versión más eficiente que H.264, ideal para contenido 4K.
    • VP9: desarrollado por Google, empleado en plataformas como YouTube para reducir el uso de ancho de banda.
    • AV1: códec emergente, conocido por su alta eficiencia y licencia gratuita.

    Los códecs también se clasifican en con pérdida (lossy) y sin pérdida (lossless). Los primeros, como MP3 o H.264, sacrifican cierta calidad para obtener mayores tasas de compresión, mientras que los sin pérdida, como FLAC o los archivos PNG en imágenes, mantienen la calidad original, pero ofrecen menor compresión.

    ¿Cómo funciona un códec?

    El funcionamiento de un códec se divide en dos procesos fundamentales:

    Codificación

    Durante este proceso, el códec analiza los datos originales (audio o video) y los comprime utilizando algoritmos específicos. Esto implica eliminar datos redundantes o irrelevantes, como frecuencias que el oído humano no puede percibir en el caso del audio.

    Decodificación

    En este paso, los datos comprimidos se reconstruyen para que puedan ser reproducidos o visualizados. El reproductor multimedia (como VLC o Windows Media Player) utiliza el mismo códec para interpretar los datos comprimidos y mostrarlos al usuario.

    Ejemplos y funcionalidades

    En una videollamada con Zoom, el software utiliza un códec como H.264 para comprimir el video en tiempo real, permitiendo que se transmita rápidamente a través de internet con calidad aceptable. Del lado del receptor, el mismo códec descomprime los datos para mostrar el video.

    Los códecs también son fundamentales en plataformas como YouTube, que convierte los videos subidos a formatos más eficientes, como VP9, para reducir el consumo de datos y optimizar la experiencia de usuario.

    En resumen, los códecs son esenciales para la eficiencia en el manejo de datos digitales, permitiendo que disfrutemos de música, videos y transmisiones en alta calidad sin ocupar demasiado espacio o ancho de banda.