Cartera Digital Beta alias "pajaporte": el Gobierno restringe el acceso al porno

Cartera Digital Beta, pajaporte, pornopasaporte… Son varios los nombres, algunos con tono humorístico, con los que se ha bautizado a esta reciente ocurrencia del Gobierno de España, anunciada a principios de julio por el ministro José Luis Escrivá. La Cartera Digital Beta será una aplicación móvil que servirá como medio de autenticación en la red. La finalidad del “pajaporte” es restringir el acceso de los menores a contenido para adultos, es decir, pornográfico.

Este proyecto digital no es una mera idea, sino una realidad que lleva fraguándose desde su licitación en julio de 2022. El diseño de la aplicación ya está terminado, por lo que solo queda la fase de desarrollo que, previsiblemente, durará dos meses. Así pues, la Cartera Digital Beta debería estar disponible para su distribución a finales de este verano.

¿Cómo funciona la Cartera Digital Beta?

Lo que hace esta aplicación es almacenar de manera segura una credencial de mayoría de edad emitida por el Gobierno, con la que el usuario puede demostrar que tiene más de 18 años. Para generarla, el usuario deberá identificarse utilizando su DNI electrónico, el sistema Cl@ve Pin o un certificado electrónico.

Una vez que el usuario ha registrado su edad y ha generado una credencial anónima a través de la Cartera Digital Beta, podrá acceder a sitios web de contenido para adultos. Para verificar la mayoría de edad, el usuario simplemente tendrá que escanear un código QR con la cámara de su móvil. Este código QR, generado por la aplicación, permitirá que la página web confirme si el usuario es mayor de edad, supuestamente, sin revelar ninguna información personal.

La aplicación también está diseñada para gestionar otras credenciales, como titulaciones académicas, el empadronamiento o la ausencia de antecedentes por delitos sexuales. Estas credenciales también se almacenan de manera segura en la aplicación y se pueden verificar mediante códigos QR similares.

En cuanto a la gestión de accesos, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) colaborará con otros agentes sociales para mantener un listado de páginas con contenido para adultos que no están bajo la jurisdicción española. Sin embargo, la restricción del pornopasaporte solo deberán aplicarla los sitios web pornográficos españoles, por lo que afamadas web porno como Pornhub o Redtube seguirían siendo totalmente accesibles.

Cada credencial emitida tendrá una vigencia de 30 días y podrá utilizarse un número limitado de veces en cada plataforma de contenido para adultos. En principio, se podrán emitir hasta 30 credenciales anónimas cada 30 días. Los usuarios podrán usar cada una hasta tres veces en una misma plataforma.

La aplicación también implementa medidas de seguridad biométrica adicionales, como el reconocimiento facial, para garantizar que solo el propietario del teléfono pueda acceder a la aplicación y gestionar sus credenciales.

El Ministerio de Transformación Digital ha publicado un vídeo explicando cómo funciona a grandes rasgos la Cartera Digital Beta:

¿Por qué se quiere crear un pornopasaporte?

Según Escrivá, el Gobierno de España quiere implantar la Cartera Digital Beta principalmente para proteger a los menores de edad del acceso a contenidos inapropiados, específicamente a páginas de contenido para adultos. Este es un tema de preocupación social y ética, ya que el fácil acceso a este tipo de contenido ejerce una influencia negativa en el desarrollo y bienestar de los jóvenes.

En general, Escrivá alude a que la exposición de pornografía en menores genera expectativas sobre el sexo y las relaciones de pareja poco realistas, y hasta lesivas. La pornografía contribuye a una visión cosificadora de las personas y a una concepción erotizada de los demás. En muchos casos, hay ciertos actos agresivos y degradantes en gran parte del contenido pornográfico que impulsa a los menores a tener comportamientos sexuales inapropiados o agresivos.

Para comprender la dimensión del problema del acceso a la pornografía de menores, algunas fuentes cercanas al Gobierno de España como el medio de comunicación Newtral han aportado los siguientes datos:

• Según el estudio del Centro Reina Sofía FAD, un 45% de jóvenes vio pornografía por primera vez entre los 12 y los 15 años.

• El mismo estudio indica que un 23,5% de los jóvenes tuvo su primer contacto con la pornografía antes de los 12 años.

• La media de edad del primer acceso a la pornografía es a los 13 años.

• En la mayoría de los casos, este primer contacto con la pornografía fue a través de internet, con un 64,7% de los jóvenes accediendo por esta vía.

• Según el estudio de Save the Children de 2020, el 68,2% de los adolescentes de entre 13 y 17 años vio pornografía en los últimos 30 días.

• Una publicación de 2023 realizada por investigadores de la Universidad de Baleares y la Universidad Ramon Llull revela que un 81% de los adolescentes de entre 13 y 18 años dice que solo mira pornografía ocasionalmente o algunas veces a la semana.

• La misma publicación indica que un 18,2% de los adolescentes de entre 13 y 18 años reconoce un uso frecuente, es decir, diario, de la pornografía.

• Según un dato ofrecido por el Gobierno y basado en el estudio de Save the Children, 7 de cada 10 adolescentes, es decir, un 70%, consumen pornografía de forma regular en España.

La iniciativa de la Cartera Digital Beta va en consonancia con los esfuerzos de la Unión Europea por hacer del entorno virtual un lugar más seguro y saludable para los menores de edad, preocupación común reflejada en la Declaración de Lovaina.

La privacidad: la principal reticencia de la población hacia la Cartera Digital Beta

La implantación de la Cartera Digital Beta suscita preocupaciones (a nuestro parecer, totalmente legítimas) en torno a la privacidad y el posible uso extendido de la tecnología para aumentar el control gubernamental sobre los ciudadanos.

Si bien el Gobierno asegura que las credenciales que la aplicación móvil comparte con los sitios web son anónimas, estos accesos siguen quedando registrados junto a nuestras credenciales, almacenadas en un repositorio de datos ingente en manos de las instituciones públicas.

Además, la preocupación se extiende a la posibilidad de que el uso de esta aplicación no se limite solo a la verificación de la mayoría de edad en sitios de contenido para adultos. Existe el miedo de que, una vez implementada, la tecnología y la infraestructura detrás de la Cartera Digital Beta puedan ampliarse a otras áreas de la vida cotidiana para acceder a los servicios públicos, participar en actividades del ámbito civil, o incluso monitorizar nuestros comportamientos y hábitos de consumo.

¿Cuál ha sido la reacción de la población ante el pajaporte?

El mote que ha recibido la Cartera Digital Beta denota la reacción del grueso de la población española ante un proyecto tan llamativo: carcajadas, en el mejor de los casos, e indignación en otros. Si bien hay un sector de la población que ve con buenos ojos la implementación del pajaporte, el sentir mayoritario que percibimos en las redes sociales es una mezcla de indiferencia y jocosidad.

Repasamos algunos tuits virales sobre la Cartera Digital Beta:

Ya habéis asociado vuestro Pajaporte a la App de vuestra paja de ahorros?

La mía en concreto es Paixabank pic.twitter.com/ZW8w52UtQJ

— Divergente (@Divergente127) July 2, 2024

*Llego a la paja 32 el primer día sin haber renovado el pajaporte*

El Gobierno: https://t.co/6y5o9GAl7e pic.twitter.com/GuEXsqOLdc

— JWulen (@JWulen) July 5, 2024

Mi colega y yo encontrándonos el segundo día en comisaría yendo a renovar el pajaportepic.twitter.com/kCkDTo6Iz2 https://t.co/olxRPX0gyj

— Dani Fernández (@danielfm_29) July 1, 2024