B-learning o la educación entre lo convencional y lo contemporáneo

El b-learning (también llamado blended learning o aprendizaje mezclado) es un enfoque educativo contemporáneo que combina el medio digital con otros métodos y actividades presenciales más convencionales. Es una manera en la que la tecnología y la experiencia educativa clásica en las aulas se fusionan para sacar provecho a lo mejor de ambas facetas de la educación actual.

Si bien la denominación de b-learning es muy novedosa y no está muy extendida, este concepto ya se conoce bien entre los docentes. La educación ha ido adoptando las nuevas tecnologías a medida que han ido permeando en la sociedad, aunque haya docentes que todavía, por falta de costumbre, se resistan a ella. En general, en todas las clases de cualquier etapa educativa podemos esperar una alternancia considerable entre convencionalismos e innovaciones educativas de la mano de la tecnología.

En este artículo te enseñamos cómo implementar el b-learning de una forma consciente, meditada y eficaz con el fin de que la sinergia entre lo tradicional y lo tecnológico den los frutos esperados en el aprendizaje de los estudiantes.

Ventajas del b-learning

Como decimos, las ventajas del b-learning o aprendizaje mezclado son las mismas que las de la enseñanza tradicional y digital, ¡pero combinadas! Aunque requiera de mayor planificación que el aprendizaje al uso, el b-learning ha resultado ser muy efectivo en el aprendizaje. A continuación, te mencionamos algunas ventajas de este enfoque educativo:

• Aprenden habilidades digitales esenciales: Los alumnos más jóvenes son nativos digitales. Y no porque nazcan sabiendo manejar con soltura las nuevas tecnologías, sino porque están inmersos en ella. Es por eso que la educación debe garantizar que los alumnos, además de las asignaturas curriculares, sepan navegar por un entorno digital y emplear herramientas esenciales como las ofimáticas.
• Es divertido: Quien aprende jugando, aprende dos veces. Las tecnologías tienden a ser más interactivas y a ofrecer un repertorio de actividades más original e inmersivo. Pero esto no quiere decir que no podamos aprovechar actividades convencionales lúdicas como se ha hecho toda la vida.
• Fomenta la cooperación: La tecnología ofrece un entorno digital colaborativo que traslada las interacciones naturales entre alumnos y entre profesores que se dan en la vida real a la esfera virtual, por lo que representa una vía de comunicación fluida y permanente que impulsa la cooperación entre alumnos.

¿Cómo implementar el b-learning en clase? Un par de ejemplos

No es difícil encontrar utilidad en los medios digitales en el aula. Pero no siempre les sacamos el mayor partido posible ni los utilizamos correctamente para instruir a los estudiantes en las competencias digitales necesarias. Por eso, te proponemos algunos ejemplos de actividades para que implementes el blended learning en tus clases fácilmente:

Foros de discusión en línea

En una clase de b-learning, el profesor comienza presentando un tema de manera presencial, explicando los conceptos claves y fomentando una discusión inicial en la que los estudiantes pueden compartir sus ideas y opiniones. 

Luego, la resolución de dudas y cualquier posible debate asociado se trasladan a un foro en una plataforma educativa como Moodle o Google Classroom. En este foro, los estudiantes pueden formular preguntas, responder mensajes públicos y privados e interactuar con los profesores y compañeros.

Evaluaciones y cuestionarios en línea

Después de una clase presencial donde se aborda un tema específico, el profesor puede utilizar herramientas en línea como Kahoot!, Quizizz o Google Forms para realizar evaluaciones rápidas y lúdicas.

Más allá de la evaluación docente, estas plataformas gustan mucho entre los alumnos porque combinan el aprendizaje con los retos de forma ociosa. Por eso, los estudiantes prefieren estas actividades más interactivas a las típicas clases en las que se limitan a actuar como aprendices pasivos.

Proyectos colaborativos en la nube

El profesor asigna un proyecto grupal durante una sesión presencial en la que determina la estructura del proyecto y la asignación por equipos. Los estudiantes, luego, trabajan en el proyecto utilizando herramientas colaborativas en línea como Google Docs, Sheets o Slides.

Con estas herramientas, que se emplean ampliamente en cualquier ámbito laboral, los alumnos quedan permanentemente interconectados en un espacio al que pueden acceder para contribuir con su trabajo, editarlo y comentar en tiempo real.

Clases invertidas (flipped classroom)

En el modelo de clase invertida los deberes no se hacen en casa, sino en clase. Supone, pues, una inversión del modelo que tradicionalmente se ha establecido: en las clases se enseña, y después, en casa, el alumno hace. 

En las clases invertidas, los estudiantes se estudian el contenido teórico en casa a través de videos, lecturas y materiales interactivos que propone el profesor en plataformas como YouTube. En la clase presencial, se centran en resolver dudas y realizar actividades prácticas basadas en los contenidos estudiados previamente.

Flujo de trabajo en línea

Esta forma de trabajar y de intercambiar las tareas entre los docentes y los alumnos se popularizó durante el tiempo de la pandemia de COVID-19, y sigue siendo la norma en la educación online. 

El profesor explica las tareas en clase que hay que hacer, detallando los objetivos y los criterios de evaluación. Los estudiantes entregan sus trabajos a través de una plataforma educativa antes de la fecha límite. A través de esta misma plataforma, el profesor califica las actividades entregadas, lo que permite a los estudiantes recibir comentarios constructivos de manera más rápida y cómoda.

Juegos educativos

Después de una introducción teórica en clase, los estudiantes pueden utilizar simuladores en línea o juegos educativos para aplicar los conceptos aprendidos. Algunas herramientas como PhET Interactive Simulations o videojuegos en la educación como Minecraft: Education Edition ofrecen entornos interactivos donde los estudiantes pueden experimentar y aprender de manera práctica.

Tutorías online

Antes de la tutoría, los docentes han de tener identificadas las áreas de mejora de cada alumno que ha advertido durante las clases presenciales. Posteriormente, el profesor organiza sesiones de tutoría en línea a través de herramientas como Zoom o Microsoft Teams, en las que los estudiantes reciben apoyo personalizado extraescolar.

Blogs

En clase, el profesor explica la importancia de la reflexión personal y cómo documentar el aprendizaje. Los estudiantes crean blogs o diarios digitales en plataformas como WordPress o Blogger donde publican sus reflexiones sobre lo aprendido o resúmenes de los temarios. 

Laboratorios virtuales

Tras una explicación teórica en clase sobre los conceptos y procedimientos de un experimento, los estudiantes pueden utilizar laboratorios virtuales como Labster o ChemCollective para realizar experimentos en línea. Los laboratorios virtuales son una opción menos explorada, ya que resultan más complejos de implementar en el aula, pero valen la pena por su potencial pedagógico y práctico.

Presentaciones multimedia

El profesor asigna temas para que los alumnos creen presentaciones sobre ellos y explica los criterios de evaluación durante la clase presencial. Los estudiantes luego crean presentaciones multimedia utilizando herramientas digitales como Prezi, Canva o Microsoft PowerPoint. Estas presentaciones se pueden compartir y presentar tanto en el aula como en línea.